Todo viene a ser un rumbo
paralelo en el que las similitudes de la vida están presentes. Cuando hablamos
pensamos o decimos que el mundo tiene un
sentido y muchas cosas que están presentes en nuestro mundo que forman parte de
nuestro pensamiento no tienen sentido porque están dentro de una realidad
amorfa, de secuencia indivisible en el paralelo de nuestra vida como un campo
corpuscular intragaláctico que deambula por todo lo que son las funciones de
nuestro ser. Tal vez un amigo para
nosotros o un hermano entra en una fase de relación paralela como si fuese una
luciérnaga vibrando en el centro de una galaxia pero a la vez se rompe cuando
el brillo pierde su intensidad. Ante los choques de la vida y los preludios del
tiempo choca todo un mundo de diferencias literal que persiste por encima de la luz de las ideas y de todo el mundo literal de la razón sin
escaparnos de que la muerte es un mundo astral que sobra en nuestro ser, todo lo que pensamos por encima de nuestro
ser es un mundo uniforme y al mismo tiempo lo que en la vida relaciona
clínicamente con la quietud de nuestro universo a lo que pude ser una unidad centesimal que mide la formulización
de la razón como un campo sublimado y
galáctico de trasferencia metafísica que va mas allá de la materia.
La filosofía corpuscular viene a ser un mundo abstracto y persecutorio sobre todo lo que es el mundo de la razón en un campo fijo que subyace en el cómputo de nuestra relación constante con el universo y sus funciones astrofísicas, teniendo en cuenta que cuerpo y realidad es un mundo alógeno dentro de la luz y del espectro de lo que puede ser la vida como una función y a la vez una apoplejía neural que dinamiza el pensamiento y las premoniciones temporales en el que la vida en términos bíblicos nació de un soplo galáctico por el creador y por el cual también ha habido pasajes filosóficos y científicos que contraponen la realidad de la existencia con lo que pueden ser las funciones del creador en un universo persistente y en todo lo que se haya dicho de que el creador no existe.
Mantengo mi postura astronómica
como metafísico y como creyente, algo que existió como una causa y un efecto
formando la causa y el efecto a la vez hasta nacer un resplandor que ilumino
los fangos apócrifos mas allá del tiempo formándose así la materia y la
pluralidad de los años venideros en lo que para un ser humano es muy difícil de
entender en el proceso de la razón en el que el hombre protagonizo la
existencia partiendo de la materia por la cual nacieron todas las fases
ardorosas de la vida sobre la razón hasta convertirse en un animal metafísico,
como Kant decía desde todos los campos de la sabiduría y hasta expandirse mas allá
de la materia y de la física desde donde se empezó a estudiar el cosmos el
orden de la naturaleza junto en etapas posteriores el espacio el tiempo y el pensamiento duro
desde la citica de la razón a la crítica
del criterio del pensamiento racional en
donde prevalecieron la materia lo intracorpóreo junto a las fases mas antagónicas
de la vida que van mas allá del criterio. Junto a la materia y las funciones de
la vida
nacieron el espacio y el
tiempo la antimateria y al mismo tiempo
desde la creación antagónica que muchos filósofos han tratado de disuadir hasta
formar un mundo en el que el pensamiento
ha desarrollado el orden de las cosa como parte solida del universo desde los
cuales nació el pensamiento empírico que es todo aquello que pasa por el factor
base de nuestra imaginación o la literatura del conocimiento abstracto en la que
las bases temporales de la vida fueron gramaticales lingüísticas y matemáticas
de persistencia disuasoria en las corrientes del pensamiento como un mundo
susceptible y tenaz de morfología
persistente en el que la razón y el conocimiento no ha podido ser apartada
todo lo que ha sido predicho desde un
mundo filosófico y científico no ha sido otra cosa para el mundo para el hombre
y pera el ser todo un campo trasformatorio en donde la realidad y la investigación
han sido expuestas para curar pero a la vez para destruir con el proceso de
nuestras enfermedades, haciendo que nuestra vida sea más sufrida y al mismo
tiempo más corta y menos pura, si nos dejásemos llevar por nuestra base de las funciones
mas racionales de nuestra conciencia para que se desarrollen nuestras ideas y
un campo soslayado que pueda dar paso a lo que tanto tiempo se lleva pensando en filosofía como razón absoluta o el sentido abstracto
del ser como parte de la morfología
de nuestra vida. Ser y conciencia van
relacionadas incluso en la trasmisión
de nuestro corazón pero pensamiento y alma son el propósito de nuestros
ideales y al mismo tiempo la función transformadora de dispersión mecánica y
cuántica con relación masa tiempo y densidad en las que la rotación de la tierra
son la constante cósmica de la llamada ley de la gravedad con premonición
constante en el vacío y donde las fases de la vida son el conocimiento psíquico de las cosas y la precognición
en donde la base más pura de nuestro conocimiento hasta alcanzar el mundo mas automático de nuestros conceptos con base
pura más exacta en la lógica y la rotación gravitatoria, que señala el mundo y la inteligencia en los procesos de la
vida como un campo gravitacional transversal eideófugo de resistencia aleatoria
que transforma las fases de toda nuestra vida por las cuales nuestra vida no puede
ser inmune a las enfermedades ni a la muerte, siendo un campo de choque de resistencia
en el tiempo que late en los fangos del
mismo hasta explotar sin contar los pasajes de las sagradas escrituras y se
traspone en el universo.
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