lunes, 15 de junio de 2015

EL  SER COMO  UNA PARTITURA CON FRECUENCIA ETÉREA.
Y UN CONCEPTO DE ENVOLTURA SÓLIDA CON COMPONENTE FUGAZ
DESDE EL ESPECTRO TEMPORAL.


 La historia como nacimiento del tiempo y a la vez del ser.
Un organigrama desde el cual se divisan todos los fragmentos que la vida clama entre las lejanías y la multitud.Paisajes del mundo etéreo y la eternidad en todas las dimensiones.

Pero todavía a lo largo de todo el recorrido por la investigación. Lo que es en realidad el ser.

¿Qué somos aparte de humanos?

Tenemos que fijar nuestra memoria en la mirada de nuestro rostro y no podemos pensar o debatir si nuestro rostro hacia nuestras palabras es la contra de nuestro adversario o intelecto.


Ideas generalizadas. Multicolor, énfasis microbiológicos, físicos, químicos, teológicos, morales y espirituales o en cuantas partes se divide el ser. O la razón bien entendida.

Los caminos del tiempo que son alternativos y recurrentes sobre las funciones de la vida. Un viaje por el universo desde nuestro principio a nuestro final podríamos decir. Medidas halladas o ecuaciones para resolver la incógnita de las distancias y encontrar las dimensiones más lejanas.

Pero por mucho discurrir y entender la vida o encontrar nuestra hegemonía. Habría mucho por decir en lo que dice o sabe la teología y la metafísica. El resultado del hombre, como hombre y mirar que las distancias y las medidas junto a toda dimensión va a parar fuera del planeta.


Generación, donde toda lejanía histórica percibe los hechos que subliman todo cuanto parte de nuestra vida y nuestra herencia como división del tiempo. La razón espiritual desde lo más profundo que nos guía desde el principio hasta el final, la secuencia de nuestros acontecimientos vividos. O la narración de un lenguaje comunicativo, cuya frecuencia consta de un alternativo o simplifícate. Somos como somos.

¿Qué somos?

Nuestra impunidad filosófica no arremete contra las fases más fuertes de la sociedad y donde la sociología no podía alcanzar más.

El mundo materialista no ha sido así porque lo haya hecho dios.

Dios creó al hombre y la materia, pero a la vez creó una base natural y tipificada en nuestra naturaleza, el compromiso con la verdadera acción del hombre. A la vez sus orígenes y circunstancias ya que todo lo que pasa por esta vida es el verdadero complemento de la creación. Conozcamos las pautas antropológicas que han dividido al hombre.


Las consecuencias del fallo del hombre las ha pagado el hombre como consecución y argumento de su naturaleza. Podríamos contar así que la naturaleza del hombre es la propia madre del tiempo o forma parte de ella.

Sabríamos componer un cuerpo geométrico, dilucidar sobre la energía y los campos físicos de propulsión hacia la materia, la ciencia como parte de la materia y la materia como centro y enclave de la naturaleza.
Nuestra naturaleza es  más fuerte que todos los reinos de la misma y por eso el hombre es el centro de la creación.

Dios seria así como el manantial planetario e interplanetario en el firmamento donde solo desembocan campos eternos.



El éter como sustancia, o el marco fluido de consistencia voluble que envuelve  a todas las demás.
Podremos encontrar en nuestro camino muchas dificultades y muchas áreas difusa ya que el centro de la realidad y de sus escalas, el avenir de las circunstancias siempre que no sean agradables y donde toda tendencia humana es el centro de todas Las cualificaciones.

Entre la vida y la existencia.

Las fases  morales están en nuestra vida como la misma acción de todo lo que se transfiere a ella.

El concepto humano encuentra siempre desde toda andadura por todas las fases biológicas y mundológicas del trayecto que fija todo el equilibrio como el tren corre por los raíles.

En el rumbo de un camino que recorre todo el universo como un punto intermitente que unifica todas las distancias.

Toda secuencia es un apartado que dibuja nuestros colores y la conciencia como base psíquica del alma.
Alma a veces inconsciente desde la base imaginaria desde la acción de la realidad.

Como el creador dijo en tiempos muy remotos. YO SOY LA VOZ QUE CLAMA EN LAS ALTURAS.
El sentido de la vida es a la vez el orden de la relación de las cosas.



TENDREMOS MAS CAMINOS QUE NO HAYAMOS PISADO Y EN LA LUZ SIEMPRE ILUMINADA POR EL CREADOR CUANDO MUCHAS VECES NOS HAYAMOS PERDIDO EN EL CAMINO Y TENGAMOS QUE RETROCEDER MARCHA ATRÁS. O NADIE RESPONDA POR NOSOTROS SIEMPRE HABRÁ UNA PUERTA ABIERTA QUE ILUMINA NUESTRA ESPERANZA. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario