miércoles, 27 de enero de 2016

EL UNIVERSO EN EL LÍMITE O LOS LÍMITES DEL UNIVERSO


Es muy largo el camino que ha recorrido la ciencia hasta llegar a los límites de la misma.

Comenzamos por un mundo de incertidumbre donde todo estaba oscuro.

Se ha hablado de la física cuántica y de los límites del tiempo hasta la cronología del tiempo y la teoría del todo de Stephen Hawking. Muchas líneas descubiertas desde Aristóteles a Einstein pasando por Galileo y Newton hasta llegar a la máxima cumbre del pensamiento y conocimiento puro cuando transgreda la historia. Todo ello será el final de la historia y comenzará otra nueva. Ya no habrá palabras para contar como puede ser y como puede verse un nuevo universo suponiendo que esto se produjese.

La función de los campos y los cuerpos en expansión son el principio del sentido de los mismos.

La suposición de que un cuerpo caiga al suelo por gravitación, presión, precisión o gravedad correspondiente espacial.

Algún día no hace mucho tiempo se pensó que no había nada para disuadir que el efecto del creador ni existía causa ni efecto para pensar que él hizo el universo.

Otras teorías teológicas expuestas en el origen del universo es que. ¿Cómo podría formarse el universo sin existir nada ni nadie o teorías más complejas?


La función de la luz y su persistencia fue la absorción de la oscuridad en un campo oscuro de un universo que traspasó la luz y luego se ennegreció, pasaron a formarse los llamados agujeros negros.

Un universo de partículas finitas y un universo con energía más aérea como corpóreo, temperatura, variables, velocidad, acción de fuerza y densidad cósmica desde los tiempos más apócrifos.

Narrar la historia del universo es narrar todo el espacio geométricamente en conexión como se miden las líneas desde muchas áreas verticales empinadas en horizontal, vertical y paralelas, etc. La historia del universo es hallar que el origen del tiempo es expositorio y resistente a su formación desde la incertidumbre a la gran explosión.

A partir de cero como un punto de fuga y un principio de gravedad.

Aristóteles entendió la morfología mecánica de la materia como una ley de resistencia sobre todo el campo que socaba una dispersión física por todos aquellos que se piensan sobre todo lo que se establece.

La disolución de una masa viscosa es hallar un número entero sobre la acción de la fluidez sobre un cuerpo sólido viscoso y con densidad soluble.

Si comprobamos que ese número es la consecución de la fluidez que parte con el conocimiento de una relación sobre los demás estados de la materia y su maleabilidad como también el campo de expansión.


El número cero en un campo de expansión hasta estallar la velocidad formando un choque explosivo. Así puede ser también el choque de una galaxia contra otra.

El universo es a la vez hasta cualquier límite un encuentro para la civilización y todas las teorías vistas desde el control de nuestra memoria.

El sentido crítico de la vida cuando un día aparece triste y nublado para entender el plano de que todo principio de lejanía es un elemento triste ante la misma tristeza de la agonía del abismo el sentido de lo que son las gratitudes del tiempo y un tiempo conplanado por la raíz de un principio de entrar en el llamado vacio absoluto.

Encontrar el vacio absoluto es encontrar la misma presión que la llamada masa por aceleración que todo principio mecánico tiene un principio de resistencia hasta conseguir que tanto la masa como la misma temperatura formase una fase caliente y otra fuese elemento frio con todo un campo candente y también de fisión que activa el calentamiento de la materia cósmica en las más lejanas galaxias y cuales cúmulos espaciales se formarían ante los absorbidos campos intranebulares así como la misma materia cósmica con masa y densidad.

Todo cuerpo y toda densidad tiene un bloque de fuerza equivalente a la acción de la energía, la fuerza y la cinemática de la misma.

En un campo soslayado donde la presencia en los campos de choque eléctrico las llamadas tormentas estelares con morfología fotovoltaica. La acción de la presión sobre la energía hasta el mismo calentamiento de la energía espacial.

Como así en la tierra si se acercase puntos de acción sobre la existencia del aire se imprimiría el no funcionamiento de la vida en el planeta si la absorción del oxígeno se produjese por un meteorito asteroide y sería terrible la explosión contra nuestro planeta que volvería a desaparecer la vida como cuando chocó el asteroide contra la tierra que acabó con la vida planetaria pero quedaron especies que luego se multiplicaron.


Todo el universo es una constante de luz radiante y armonía y a la vez sonido por causas expansivas y explosivas como puede ser la velocidad del aire terráqueo y otro aire explosivo de acción que formaliza un efecto sonoro y de lejanía.

Cuando la persistencia de la luz está expuesta ante un plano de solidez de entrada y salida la luz se convierte en un verdadero efecto fluorescente que camina en rededor por nuestra galaxia.

También como en la tierra, en el espacio existe un campo libertario con morfología anárquica espacial desde el llamado orden la situación cartográfica aeroespacial con movimiento y sustancia intergalactiva sobre la precisión dinámica del efecto tiempo, limite y sublimidad.

EL SENTIDO DE PERSISTENCIA DE UNIVERSOS INFINITESIMALES CON LA PERSISTENCIA EXPANSIVA DE TALES POSIBLES UNIVERSOS. DONDE LA ENERGÍA ESTÁ EN UN LÍMITE QUE A LA VEZ ES CONSISTENCIAL SOBRE OTROS LÍMITES QUE TIENEN UN ROZAMIENTO SOBRE LAS FASES BINARIAS Y TIENEN UN LARGO RECORRIDO SOBRE EL INFINITO DE LAS DISTANCIAS.

DE TODAS LAS FORMAS EL UNIVERSO ES IGUAL A UN TIEMPO INFINITESIMAL DESDE TODOS LOS LÍMITES QUE RELACIONAN TODAS LAS FUENTES DE LA VELOCIDAD, LA ENERGÍA, EL SONIDO Y LA LUZ QUE SE PIERDE EN TODAS LAS DISTANCIAS DEL MISMO.







miércoles, 20 de enero de 2016

NUESTRA VIDA, UNA CONSTANTE OSCILATORIA Y UNA DENSIDAD TEMPERAMENTAL
ANTE UNA DIMENSIÓN FUGAZ Y VIOLENTA


¿Cómo podríamos pensar de nuestra vida? A pesar de todo lo que tenemos llega como una estrella fugaz a los límites del universo y a los confines del mundo.

Pero el ser, a lo largo de su camino, puede decir de él que lo es todo porque lo dará todo, y llena todo un peso específico como el poder, el estado, la gracia de la vida, la vivacidad de la sangre, la conjetura de su condición y de su conciencia cuando se encuentra lleno en sí mismo, o la plenitud de todo lo que rodea su vida.

Desde el principio de la vida, el hombre es un organismo celular que contrarresta a tiempo y las suposiciones que se pierden entre la realidad y los confines del tiempo.

Si dura el momento, una novela, de un verso una poesía, una línea recta y una raíz cuadrada. Ante todo lo que tanto, la realidad como la vida son una constante oscilatoria que se mueve en los confines de la velocidad y la armonía persistente en el tiempo. Igual que nuestra memoria y nuestro recorrido por la vida, con una densidad temperamental de las líneas del universo, aunque son indivisibles, lo mismo que la molécula surge a tiempo entre la vivacidad y la fuerza.


Ya no habrá más caminos que recorrer si el colorido de las muestras y las variables a los que el ser está expuesto ante las funciones del tiempo, su consistencia y la relación que narra el ritmo de las cosas y cuanto pasa por ello.

Todo cuanto sabemos, delatamos y sentimos sería una constante del tiempo entre la razón de las cosas como la realidad y las ideas, no terminaría nunca hacia un mundo malversado por no entender que la cifra y el número no son un campo exacto matemático, ni las matemáticas lo son sin una constante que marca el ritmo de una dimensión. Y la virtud dimensional conceptúa un campo de resistencia.

Las funciones de la vida son un campo elemental donde está la pasión, el verbo reaccionario y gramatical, la realidad, el movimiento, la energía, y la propia realización que camina hacia un rumbo libertario como conjunción del hombre hacia el por qué de las cosas.

Una lindera en nuestro compás seguida de un arte fundido en la materia, y una energía hasta la interacción de las constantes visuales de nuestra vida, todo lo que nos rodea y el núcleo de coincidencias que formulan las fases del tiempo ante la amalgama de la vida.


Por todo un techo histórico que irrumpe literalmente ante las fórmulas de disuasión que fulguran desde el interior de nuestra vida hacia un campo exógeno externo, que bifurca nuestro entender, las cosas desde la razón de un entredicho.

Entre la determinación de una dimensión está el conjunto de relaciones que causan un movimiento sobre la acción de los cuerpos, las cosas, y los mismos números que indican la relación de las ideas del ser de toda cuantificación sobre los elementos.

Si el agua es un elemento y una medida, es un campo exacto que determina las constantes de relaciones numéricas que se decantan hacia la formación de todo su elemento, que hace la morfología del movimiento y sus contrastes continúan en un ser hasta sus confines.

La energía es como un campo de choque que conceptúa el comportamiento de la acción de los números, combinando un campo de acción sobre las estructuras del tiempo y sus circunstancias. Todo puede ser desde el conjunto de alternativas que rodean la conjunción de las cosas, toda una tabla gramatical de oraciones que en el campo de la exactitud, o el ir a mirar las cosas de una nueva manera distinta hacia un campo retrógrado o el ir por encima de todo lo que nos rodea de una forma predispuesta que literatos como Julio Verne, que lo que generaron en su día fue poner los pies en la realidad desde la posición actual de los momentos vividos.

Una fórmula, una oración, un fragmento, una poesía, una canción, una oda, caminan el argumento.

Toda esfinge expuesta a la luz de la historia por todo lo que el hombre quiso aprender y un número hallado, por difícil que sea, una operación matemática, la relación del ser con las matemáticas es un mundo infinito que denota la exactitud de la realidad con toda aquerencia física que rompe sobre el tiempo y sus fronteras hasta el infinito.

Grandes filósofos de la antigüedad, como Anaxágoras, entendieron la vida desde la función de la física de los cuerpos. La vida, en un campo de ficción, la temperatura sobre la acción de la vida y los elementos como una relación centesimal entre el por qué, la causa cierta y el sentido que tenían las cosas sobre la física, la alquimia, las distancias y todo lo que de otra manera podríamos llamar la sustancia alternativa, que en otro orden de cosas, era en aquel entonces la viveza de los campos de la vida, y su solidez sobre la materia junto a todo aquello que demarca la conexión entre los rumbos de la persistencia y hacia un mundo superlativo y fugaz, vivo y en expansión, que se expande hacia la explosión de los campos atómicos del espacio.


TODA UNA CONSECUCIÓN FORMULATORIA QUE DIVIDE LOS TÉRMINOS Y LAS FRECUENCIAS.

UN DRAMA CONSECUENTE CON LA ACCIÓN DE LA VIDA SOBRE LA INCIDENCIA DE LOS CAMPOS CINEMÁTICOS DE LA DINÁMICA, LA TERMODINÁMICA, LA REALIDAD Y EL SONIDO, ASÍ COMO LA LUZ Y LA FORMACIÓN DE LA ENERGÍA.

¿PERO DÓNDE ESTÁ LA CONSECUENCIA DEL VALOR DE LA EXACTITUD? DIRÍASE ASÍ EN UN CAMPO DE ACCIÓN VIOLENTA EN EL QUE DICHAS ÁREAS SON EL SIGNIFICADO Y EL RESULTADO DE TODA RAÍZ HALLADA.











lunes, 11 de enero de 2016

EL ALMA Y EL CEREBRO
CEREBRUM CUANTICA-ANALITICA


 Por mucho que se ha planteado el hombre en buscar fórmulas nuevas para conseguir mucho más conocimiento del que tiene, por la trayectoria cronológica del tiempo.

Son muchas las estructuras que tiene en su vida como secuencias tiene la historia.

La palabra “hombre”, o el significado de la integridad del hombre en la historia, analíticamente. Sin pensar que el alma no se puede psicoanalizar.


El alma es todo un campo invisible oculto en las entrañas de nuestra vida, y la neuma psíquica o el corazón. Todo nuestro pensamiento y nuestra inteligencia que coadyuvan todo cuanto pasa y rodea nuestra vida.
Pero el alma en sí, desde todo apartado metafísico, por muchas veces que digamos.

Tengo el alma partida y no es así. Sino el corazón que sufre y se manifiesta en  un estado de penumbra que oscurece nuestra vida y nuestra alegría de vivir.

Todo ser humano tiene una base espiritual, otra psíquica y otra lógica-moral.

Entender toda nuestra morada psicológica como el alfil en una partida de ajedrez que se come a la reina o a la torre, que enroca con un caballo al rey y le da jaque.

También nuestra vida está puesta en jaque cuando hay otro adversario opuesto a nuestras funciones, que se cruza en nuestro camino y obedece órdenes no anárquicas sobre nuestro ente y le desplaza sin poder decir al adversario nada al respecto.


Nuestra vida existencial es la segunda dimensión de nuestro ente y la formulación a la que el ente se divide en un vacío no afectivo, sino un campo espiritual activado por el tiempo y las secuencias de nuestra vida. El motor del tiempo, que es el creador, y el venir de nuestras oraciones y nuestras plegarias, con nuestro amor al creador y a nosotros mismos como un ente consecutivo cuando se oscurece nuestra vida por una causa física sobre nuestro cuerpo.

Pero existe un preludio que en metafísica está expuesto de forma inteligible como la unidad de nuestras capacidades diferenciales y mentales. Memoria, inteligencia, conocimiento, razón y conciencia, sin saber por qué yo siento o por qué yo pienso.

¿Pero cuáles son las fuerzas que nos impulsan a pensar?
O si por nuestras plegarias pensamos que fuésemos mejores si no somos en conciencia y raciocinio.

Si nuestro ser se desplaza de nuestra función psiconéumica es de entender y muy difícil que salga de ahí.


En el Egipto faraónico, la vida del yo o súper ego de nuestro tiempo no hubiese nacido en él, y la historia. La historia, si fuese de color púrpura, y las relaciones del ente, todo lo que piensa nuestra inteligencia y todos los apartados intelectuales, y no la mente como dirían tantos filósofos.

Hoy ya se habla de una mente cuántica como una línea imaginaria transversal al tiempo que cruza como un meridiano cero de nuestra vida. Un campo imaginario que predispone una realidad imaginaria supuesta en el tiempo que relaciona nuestros conceptos y sus claves.

El cerebro y nuestra inteligencia para cualquier psicoanalista tienen una correlación material, pero toda función material que desemboca en un vacío no afectivo, sino un campo espiritual activado por el tiempo y las secuencias de nuestra vida. El motor del tiempo que Dios y el venir de nuestras oraciones y nuestras plegarias por nuestro amor al creador y a nosotros mismos como un ente consecutivo, cuando se oscurece nuestra vida sobre una causa física.


Pero por nuestra vida daremos la recompensa al final de nuestro paso por el tiempo, cuando nuestro corazón, nuestra neuma, nuestra psique y nuestro cerebro hayan vivido en estado puro mediante una conciencia pura a la evolución y una consecuencia que no va más allá del tiempo. Con nuestros pasajes como permanencia en la historia, y pensar en ser nosotros como ente humano, y no nosotros en el tiempo como  hechos en la historia, nuestra vida seguirá siendo un campo metafísico transversal como parte anómala de nuestra conciencia, y siga siendo nuestro cerebelo el que envía todas las funciones por las que pasa toda nuestra capacidad intelectual y nuestra capacidad siga siendo un misterio todavía sin descifrar, aunque se conozcan campos de nuestra neuroanatomía, que rigen nuestra capacidad y nuestra capacidad también está regida por metafenómenos externos y exógenos a nosotros mismos como los mismos elementos de la vida y el choque con la luz y la energía.

TODO UN PANORAMA QUE ENVUELVE TODA NITIDEZ, TANTO ORGÁNICA COMO INORGÁNICA, QUE DISUADE DE FORMA CRISTALIZADA LOS OJOS, LA RESPIRACIÓN Y NUESTROS OÍDOS.


TODA NUESTRA VISIÓN Y ÓPTICA PSÍQUICA QUE DESARROLLA TODO CUANTO PASA POR LAS CORRIENTES DE ESE NICHO HUMANO CUYOS OJOS Y NUESTROS SENTIDOS, JUNTO CON NUESTRO CEREBRO Y NUESTRAS EMOCIONES, UN ENCUENTRO CON NUESTRA INTELIGENCIA Y CON NUESTRA SENSIBILIDAD.