SOBRE LA ÉTICA, LA MORAL Y LOS VALORES.

 La historia se asemeja a un mundo espontaneo donde la consecución de las cosas unifican el alma con el espíritu si no comprender algo distinto en el que el hombre ha estado formado con la ecuación unánime del conocimiento moral donde el hombre ha estado expuesto cuyo conocimiento está  en el valor de las cosas , la secuencia de un principio y un final que transmite una vida multicolor como una consecución cuyo término es un campo cuántico personal con una morfología diferente y distinta que relaciona un polo con otro evidencialmente cuya causa es un móvil que recorre todo cuanto  transcurre un mundo con un principio y una base adyacente que recorre nuestra vida en una línea diagonal donde el hombre ve la misma persecución de si mismo sobre los circunstancias que le rodean por causa de su inteligencia. Las bases de la vida y sus conocimientos como parte  anómala cuyas fases son las constantes que le rodean.

Las fases del conocimiento son  una sabiduría que confluye en un campo donde la eternidad nunca termina y donde al final de nuestra vida solo habla de lo que el tiempo ha pasado cuánto daño le ha hecho y todo su transcurso por la vida su secuencia a y nuestro paso por el tiempo.

Si la razón no llega a entenderse del todo la realidad será todavía mucho, mas difícil de entender y de explicar con un campo definitorio distinto a todo lo que son nuestras funciones morales y espirituales suyas que el tiempo tiene una métrica totalmente distintas a lo que pensamos sentimos  dialogamos y oímos cuando. El tiempo toque a su fin y la relaciones cósmicas consistentes a toda una fase como lo que pudo haber hecho es confundir los términos y una causa diferencial como consecuencia física y de un  mundo transitorio de una dimensión totalmente diferente que desarrolla todo los fines que  subrayan todo cuanto somos.

Cometemos errores y secuencias de una vida sostenida,  unificada con la base alternativa de una frecuencia diferente de una manera distinta,  una relación  numérica distinta y una base social y moral  muy distinta que no conoce sus causas y con suposición de consistencia de superación entre la vida y la muerte,  como un camino muy lejano que recorrer con un destino que aunque las causas se desconozcan el destino es un mundo muy lejano demarcado que solamente la relación psíquica y una  ética moral y personal no están totalmente desplazados en una fase del conocimiento diferente,  a una secuela que le ha dejado ya que el creador se mostró para el hombre,  como lo mismo que fue el universo el creador y el hombre.

La moral, la ética, la inteligencia y la personalidad del ser son una  consecuencia evolutiva del tiempo y la secuencia  del área de la creación. La vida y todo cuanto le rodea y presente que no es  otra cosa tanto como lo que es y ha sido. Una secuencia y una consecución permanente de la misma evolución.

las estrellas se mirará a sí mismo, mirará a los ángeles y a la vez mirará mirara a Dios y a Jesucristo que será totalmente lo que hasta ahora han dicho las sagradas escrituras, que cuando el hombre piense en las cosas de Dios pensará también en las de la Tierra como planeta azul, en el que ha estado insertado y establecido porque Él mismo lo puso cuando explosionó para poner al hombre en el lugar donde le correspondía y unificó la correlación de la secuencia de esa vida que funcionaliza su propio margen de las cosas, la realidad de nuestro tiempo, las luchas de la historia, la correlación entre la vida y la muerte, el más allá y la penumbra de todo en cuanto nace, vive y muere.