lunes, 27 de marzo de 2017

TIEMPO Y ETERNIDAD.
DOS LÍNEAS PARALELAS QUE SE PIERDEN EN EL FIRMAMENTO.



A lo largo de los años desde principios de la historia del tiempo, se divisan dos fronteras diferentes y paralelas en dimensiones distintas.

La primera luz del tiempo, o el pensamiento del hombre que se preocupó por entender el espacio e ir más allá del mismo con su propia ambición hasta descubrir las máximas metas. Observatorios, viajes espaciales y la biofísica del planeta tierra en el cosmos.

Grandes astrónomos, metafísicos, físicos y filósofos vieron a ciencia cierta y dijeron un poco de todo.
Desde un telescopio el hombre miró al firmamento, a las estrellas, las medidas universales y físicas que fueron a la vez la cuadratura del tiempo.
Podíamos decir de esa fórmula que el tiempo tiene una dimensión cuadrangular lo que todavía se entiende desde el teorema de Pitágoras, como el cuadrado de los lados de un lado.
La llamada estructura del tiempo es la misma luz eterna que compone y comprende todos los demás.
Ahora en nuestro tiempo esa dimensión o el universo unificado con el ser sería como un triángulo equilátero con los lados del vértice de un cuerpo escaleno que deambula de una forma unida y unificada a la eternidad cuya densidad no tiene calibre.

Incluido el tiempo sobre el infinito, entre el principio y el final.
Todo viene a ser un mundo creado por el hombre. Una constante primigenia entre la historia y los campos dinámicos en los que se ha movido el hombre. Entre como ha sido el hombre y el hombre la misma base de relaciones entre el principio y el fin de dos fórmulas cuyo principio es el resultado de todas las matemáticas halladas.

Para el ser el principio es algo como lo que puede ser la expansión del inicio de un término que compone el número cero.

Todo cuerpo y todo espacio expanden un lugar en el cosmos equivalente a un campo halógeno a la densidad de superficie y volumen junto a todo lo que rodea el ser y su destino.
Si todo tiene un principio y un final hay que tener en cuenta que todo y para todo, hay que comprender la causa y el efecto del destino.


Saber que las causas del destino son la misma terminología que nos impulsa a comunicarnos y a caminar.

Cuando la materia putrefacta se descomponga y lo mismo que no se descompone es la función vibratoria del espacio.

En los campos paralelos va unido el órden y el desorden de los componentes entre el caos y el ocaso.
No se sabe si el tiempo acabará o persistirá para siempre en la constatación rumbo a que todo tiene un principio y un final. La secuencia de la eternidad.

TODO VIENE A RELACIONARSE SOBRE EL CONJUNTO DE ÁREAS QUE SON UN PARÁMETRO PARA TODOS LOS LUGARES DONDE Y EN EL QUE SE HA ENCONTRADO.
EN EL TRANSCURSO DESDE UN ÁREA INDEFINIDA, DONDE LA CONSECUCIÓN DE UNOS LÍMITES QUE SON EL PRINCIPIO DE LOS TIEMPOS.




A UNA MORFOLOGÍA EN DONDE SE DEMUESTRA LA EXISTENCIA DEL HOMBRE Y UN CORAZÓN QUE LATE CON LA FRECUENCIA DE UN MUNDO POR EL QUE EL HOMBRE HA BUSCADO Y ES ALGO MÁS QUE UNA FUNCIÓN O EL SUEÑO QUE NOS HACE PALPITAR EN LA RAÍZ DE TODO LO EXISTENTE Y TODO LO QUE HA PERCIBIDO DESDE TODOS LOS CAMPOS DEL CONOCIMIENTO.