FELICITACIÓN NAVIDEÑA PARA TODO EL PÚBLICO Y SEGUIDORES DEL BLOG
Por estas fechas, donde nos
encontramos muy cercana ya la Navidad, con la cual me congratulo a felicitarles
por la atención prestada a lo largo de todo este tiempo que llevo trabajando
sobre esta página internacional. Los principios fueron duros y difíciles, poco
a poco se fueron mejorando y entramos en nuevas panorámicas y perspectivas.
Como nadie sigue por un camino que sea el fin de su trayecto, ya que ese camino
no aparta para nada al hombre y le establece como una secuencia más de su vida.
Entre otras cosas, el hombre en
el tiempo, aun con sus equivocaciones, y porque somos seres humanos, hemos
disuadido toda persecución hacia un mundo extraño que nos rodea y que no
sabemos cómo pararle ni socavar al tiempo todas nuestras relaciones e
inquietudes físicas, psíquicas y emocionales.
La vida humana se predispone
entre todos los apartados del tiempo, pero sumisamente hasta conseguir que los
resultados de la vida después de entenderse por encontrarlos como los mejores
no tocan tampoco el fin de los conceptos determinados de la historia ni del
pensamiento del hombre. Porque cada uno es como es, y cada quién es cada cual.
Nadie ni nada puede justificarse
como la aclamación máxima del tiempo, sino de una forma sumisa y humilde para
que no nos la allanen ni nos la humillen, sino que estemos sumisos al tiempo y
a las pautas que recorren por aguas tranquilas nuestro camino, vicisitudes, y
todo cuanto rodea a nuestro cómputo real
de lo que puede ser en concreto la vida de las personas, sin entrometerse entre
las mismas, sino que somos una unificación que late entre todas las latitudes y
en los cinco continentes.
Tal vez no nos conozcamos, ya que
es por no habernos visto ni coincidido, pero somos una especie humana que
tiende a unirse una con la otra en el tiempo fijado que cruza todos los
baremos, baluartes, y entabla en el mayor de los conceptos la sublimación de
nuestra vida y de nuestra sensibilidad, porque ya no es la mente quien piensa
por nosotros ni quien piensa por los demás, sino que los demás son nuestra
mente, y nuestra mente es eterna como el tiempo: algo que perdura y nadie puede
erradicar de sí mismo. La cordura de la vida es pensar que existe una dimensión
superior a los confines y el orbe de todo cuanto ocurre, sublima, especifica o
entiende que las masas humanas se han unificado unas con otras, pero no otorga
todo esto a que las masas no puedan apartarse unas de otras sino que somos
todos para uno y uno para todos.
Dentro de lo que puede ser que el
hombre necesita de su ser más cercano o lejano para comprender que su vida no
es nada más propiedad de su persona, sino que hay personas que anhelan la vida
de otras sin entender que solamente se comprende la imagen pospuesta del alma y
del espíritu, que nuestra conciencia piensa por encima de nuestro pensamiento,
desde el cual el conocimiento humano se ve bifurcado en una barrera con un
límite que el hombre ha sido incapaz de traspasar.
A lo largo de todo este tiempo
que llevo trabajando en esta página, he estado al borde de un verdadero
precipicio por un problema de salud grave que me ha apartado del ritmo de mi
pensamiento y ha frenado mi capacidad en el tiempo por la cual esta página no
ha podido ir más lejos. Pero agradezco la colaboración de toda esta gente que
trabaja a mi lado, a la cual deseo una feliz Navidad y un próspero año junto a
todos los seguidores de esta página, a la cual dedico mi máximo elogio por la
atención recibida y prestada. Cuantos han seguido este blog desde sus principios
se habrán dado cuenta de lo difícil que es la metafísica y llegar a través de
esta materia tan compleja del conocimiento al corazón de las personas, desde
los más pobres hasta los más ricos, empezando por los que menos tienen, por lo
cual me caracteriza mi índole carismática como metafísico hasta llegar a
comprender que la relación de las ideas, el futuro y el pasado ya no tienen
límite, y vivir el presente es lo máximo que podemos hacer a la hora de
realizar nuestros quehaceres; pensar, sentir, hacer y entender.
Pero todo no acaba aquí, sino que
todo lo que acaba en un punto comienza en otro, quizá más distante que todo
cuanto tenemos en nuestro pensamiento, en nuestro corazón y en nuestra vida,
como parte de la raíz de nuestro raciocinio y la amalgama del tiempo que no ha
dejado de persuadirnos y persuadir nuestra conciencia, como parte central de
nuestro conocimiento.
Y para terminar, me despido de
todos los seguidores que han estado siguiendo a esta página, que he intentado
llegar a lo más hondo y más lejano del planeta Tierra, donde las distancias,
aun siendo lejanas, han seguido la simetría de un mapamundi que ha surgido de
la latitud, de las técnicas y tácticas informáticas; internet me ha facilitado
para llegar a todos esos lugares.
Con todo ello quiero darles las
gracias a todos aquellos que se encuentran muy lejos de estas latitudes. A
todos estos seguidores de los cinco continentes, a mis amigos de España, y a
los más allegados, presentes y simpatizantes, aficionados a la filosofía y a la
cultura intelectual, con lo cual quiero dedicarles todo mi privilegio como
metafísico y desearles una feliz Navidad y un próspero año nuevo en el que
entramos.
Muchas gracias por la atención,
les saluda atentamente a todos:
Che Leonés.